
Existen suplementos naturales que suponen una alternativa a los ansiolíticos habituales.
La familia racetam, como aniracetam y oxiracetam. Tienen afinidad por los receptores de dopamina en el cerebro y desensibilizan los receptores de glutamato (excitatorios). La dopamina aumenta la confianza y la autoestima. Antipsicóticos como la olanzapina tienen efectos ansiolíticos gracias a su acción sobre los receptores de dopamina.
Otros ansiolíticos naturales que actúan sobre la dopamina son la l-teanina, la l-tirosina y la vitamina B9 (junto a B3, B6 y B12). Recuerden que el folato es un cofactor en la síntesis de dopamina, norepinefrina y serotonina. Se involucra en la circulación cerebral y en la síntesis de mielina. La vitamina B 6 ayuda al cerebro a producir serotonina, norepinefrina y melatonina.
La B 12 (metilcobalamina) puede ayudar a reducir la ansiedad, mejorar la cognición, la energía, el estado de ánimo y aliviar el insomnio.
El glutamato en cambio, es un neurotransmisor excitatorio y tendrá un efecto beneficioso si inhibimos sus receptores NMDA. Un ejemplo sería la uña de gato, l-teanina (té verde, negro y oolong), noopept y la familia racetam.
En ocasiones usamos betabloqueantes como el propanolol, que actúa como antagonista de los receptores B2 adrenérgicos. Un substituto natural sería el DHA, omega 3. A dosis de 1 gramo diario (mitad EPA), es capaz de mejorar el TDAH, la ansiedad o la demencia.
Otra opción es el glicinato de magnesio, relajante muscular y beneficioso en la ansiedad, la confusión mental y la depresión.
De siempre se ha usado la hierba de San Juan o hipérico para la ansiedad, depresión y el estrés, dado que impide la recaptación de serotonina como muchos antidepresivos, aumentando dicho neurotransmisor en el espacio sináptico.
La ashwagandha y la bacopa monnieri son considerados adaptógenos, capaces de revertir la ansiedad y el estrés crónico.
El ginkgo biloba aumenta el estado de alerta y mejora el estrés, el ánimo y la ansiedad social.
El bálsamo de limón tiene ácido rosmarínico que aumenta los niveles de Gaba, calmando la mente.
El chocolate negro (mayor de 75% cacao) estimula la liberación de feniletilamina (aumenta la concentración). anandamida (molécula de la felicidad), teobromina (flujo sanguíneo) y es una fuente de triptófano (precursor de serotonina).
Rhodiola rosea mejora la depresión, reduce la fatiga, estimula la energía y el estado de alerta aumentando la cognición.
El ginseng y el gotu kola mejoran el estado de ánimo, reducen los niveles de ansiedad y aumentan la resistencia al estrés.
El kava tiene efectos sedantes pero no altera la función cognitiva, cosa que sí hacen las benzodiacepinas.