SINDROME DE ALERGIA ORAL

Si eres alérgico a las gramíneas, es posible que hayas notado picor en la boca o molestias al comer ciertas frutas, verduras o frutos secos. Esto no es casualidad: se debe a un fenómeno llamado reactividad cruzada, donde el sistema inmunitario confunde proteínas similares en pólenes y alimentos.

En este artículo, te explicamos qué alimentos pueden desencadenar estos síntomas, por qué ocurre y cómo manejarlo.

¿Por qué algunos alimentos dan reacción si soy alérgico a las gramíneas?

Las gramíneas (como el césped, el trigo o la avena silvestre) comparten proteínas con ciertos alimentos, especialmente frutas y verduras. Las más implicadas son:

  • Profilinas: Sensibles al calor (suelen causar síntomas leves, como picor en la boca).
  • LTPs (Proteínas Transportadoras de Lípidos): Más resistentes y asociadas a reacciones graves.

Esto explica que, aunque tu alergia sea al polen, tu cuerpo pueda reaccionar al comer un melón o un tomate crudo.

Alimentos que pueden causar reactividad cruzada

Los siguientes alimentos son los más vinculados a la alergia a gramíneas, aunque no todos los alérgicos reaccionan igual:

Frutas

  • Melón y sandía (los más comunes).
  • Melocotón, ciruela, albaricoque y cereza.
  • Kiwi y cítricos (naranja, limón).

Verduras y Tubérculos

  • Tomate (especialmente crudo).
  • Patata (puede causar picor al pelarla).
  • Pimiento.

Frutos Secos y Legumbres

  • Cacahuete, avellana y almendra.
  • Lentejas, guisantes y soja.

Cereales

  • Trigo y otros granos (en casos de sensibilidad a proteínas como las LTPs).

Síntomas habituales

La mayoría de las reacciones son leves y forman parte del Síndrome de Alergia Oral (SAO):

  • Picor en labios, lengua o garganta.
  • Hinchazón leve en la boca.
  • Molestias al tragar.

En raros casos (especialmente con LTPs), puede haber reacciones sistémicas (urticaria, dificultad respiratoria o anafilaxia).

Consejos para manejar la reactividad cruzada

  1. Identifica tus desencadenantes: Lleva un diario de alimentos y síntomas.
  2. Pruebas de alergia: Un alergólogo puede confirmar sensibilidades con tests cutáneos o análisis de sangre.
  3. Cocina los alimentos: Las profilinas se destruyen con calor, así que comer tomate cocido en lugar de crudo puede evitar reacciones.
  4. Pela las frutas: La piel suele concentrar más alérgenos.
  5. Extrema la precaución en temporada de polen: La reactividad puede ser más intensa en primavera y verano.

¿Cuándo buscar ayuda médica?

Si experimentas:

  • Dificultad para respirar.
  • Hinchazón en lengua o garganta.
  • Mareo o caída de tensión.
    Acude a urgencias, ya que podría tratarse de anafilaxia.

Conclusión

La alergia a las gramíneas no solo afecta en días de alta polinización: también puede influir en tu dieta. Conocer los alimentos de riesgo y cómo prepararlos te ayudará a reducir síntomas. Si sospechas de reactividad cruzada, consulta en nuestra clínica para un diagnóstico personalizado.