El vídeo de este artículo muestra el exceso de estimulación sensorial que recibe un niño con autismo. Muchos de sus comportamientos responden a la evitación sensorial.

La teoría más plausible es la falta de poda neuronal, ya vigente desde periodos fetales hasta la adolescencia. El exceso de proteína mTOR, estimula las neuronas para producir más proteínas y crecer más. Los niños con autismo tienen niveles inusualmente altos de la proteína activada, lo que parece interferir con la poda sináptica.